¿Qué es un otohematoma en perros?
El otohematoma en perros es una acumulación de sangre, entre las capas de la piel y el cartílago de la oreja, que genera una inflamación visible y palpable. Es una condición que suele ocurrir tras sufrir un traumatismo en la oreja, como sacudidas violentas de la cabeza o rascados frecuentes debido a infecciones o alergias.
Esta acumulación de sangre ocurre porque los pequeños vasos sanguíneos de la oreja se rompen y, al no encontrar una salida natural, la sangre se acumula, lo que crea la hinchazón característica que varía en tamaño y forma. La oreja afectada suele estar caliente, enrojecida y puede causar molestias o dolor al animal.
El otohematoma afecta con mayor frecuencia a perros de orejas largas o colgantes, como los cocker spaniel o los labradores, aunque también puede presentarse en razas con orejas erectas.
Si no se trata, el hematoma puede endurecerse con el tiempo y dar lugar a deformidades permanentes en la oreja, conocidas como «oreja de coliflor».
Conocer las causas y reconocer los signos a tiempo es fundamental para garantizar un tratamiento adecuado y evitar que esta condición afecte a la calidad de vida del perro.
Síntomas del otohematoma
Los síntomas de un otohematoma en perros son fáciles de identificar, ya que la oreja afectada suele mostrar una hinchazón anormal, que puede ser blanda o firme al tacto, dependiendo del tiempo que haya pasado desde su aparición.
El perro podría mostrar signos de incomodidad, como sacudir la cabeza de forma constante, rascarse la oreja o mantenerla caída si normalmente la tiene erguida.
En casos más avanzados, la piel de la oreja puede enrojecerse y el perro podría manifestar dolor al tacto.
Para diagnosticar un otohematoma, el veterinario llevará a cabo un examen físico detallado y podría utilizar una aguja para aspirar una pequeña cantidad de líquido de la hinchazón. Esto ayuda a confirmar que se trata de sangre acumulada.
Además, el veterinario investigará las posibles causas subyacentes, como infecciones en el pabellón auricular, canal auditivo o posibles alergias, para evitar que el problema se repita.
¿Cómo curar un otohematoma en perros sin cirugía?
Tratar un otohematoma en tu mascota sin recurrir a la cirugía es posible en los casos leves o cuando las condiciones del perro no permiten una intervención quirúrgica.
Los tratamientos conservadores incluyen el drenaje del hematoma en el centro veterinario mediante aspiración con aguja fina. Este procedimiento consiste en extraer la sangre acumulada con una jeringa para reducir la hinchazón. Sin embargo, este método tiene altas probabilidades de que el hematoma reaparezca, ya que no aborda la causa subyacente ni evita que la sangre vuelva a acumularse.
Otra opción es el uso de medicamentos antiinflamatorios, como corticosteroides, para reducir la inflamación y facilitar la reabsorción de la sangre.
El vendaje de la oreja puede complementar estos tratamientos al inmovilizarla y prevenir un trauma adicional. Sin embargo, es crucial que sea supervisado para evitar complicaciones, como infecciones secundarias.
Aunque los métodos conservadores pueden ser efectivos en algunos casos, la cirugía sigue siendo la solución definitiva, especialmente, en otohematomas grandes o recurrentes.
Cirugía para el otohematoma
La cirugía es el tratamiento más efectivo para corregir un otohematoma en perros, especialmente cuando el hematoma es grande, recurrente o causa molestias significativas.
●Primero, el veterinario realiza una pequeña incisión en la oreja para eliminar la sangre y los coágulos.
●Después, se colocan puntos de sutura a lo largo del cartílago, lo que mantiene la oreja plana y permite que los tejidos cicatricen adecuadamente.
●Estos puntos se suelen dejar durante varias semanas para garantizar que el hematoma no regrese.
En hematomas de gran tamaño, se suele utilizar un drenaje quirúrgico, como tubos o sistemas de presión negativa, que permite el drenaje continuo de fluidos mientras la oreja cicatriza.
Después del procedimiento, el perro debe usar un collar isabelino para evitar que se rasque y dañe las suturas.
Con un cuidado posoperatorio adecuado, los perros suelen recuperarse completamente y sin complicaciones.
¿Qué pasa si no opero a mi perro de otohematoma?
No tratar un otohematoma en tu mascota puede tener consecuencias negativas, tanto a corto como a largo plazo.
Inicialmente, el hematoma puede aumentar de tamaño, lo que causa más molestias al perro debido a la presión en los tejidos de la oreja. Esto puede generar dolor, incomodidad y cambios en el comportamiento, como irritabilidad o apatía.
Con el tiempo, la sangre acumulada en el hematoma comenzará a coagularse y la inflamación se endurecerá, formando una deformidad permanente conocida como «oreja de coliflor». Aunque esta condición no pone en peligro la vida del perro, puede afectar su calidad de vida, ya que la oreja puede volverse más susceptible a infecciones y traumatismos.
Además, al no abordar las causas subyacentes, como infecciones de oído o alergias, el perro seguirá rascándose o sacudiendo la cabeza, lo que puede provocar nuevos hematomas o agravar el problema existente.
Por estas razones, es crucial buscar una atención veterinaria temprana para evitar complicaciones y garantizar el bienestar del perro.
¿Cuánto cuesta una tratamiento, cirugía u operación de otohematoma en perros?
El precio del tratamiento para un otohematoma en perros puede variar significativamente dependiendo del tipo de tratamiento, la gravedad de la condición y la clínica veterinaria.
La cirugía, que es el método más efectivo, suele tener un precio que oscila entre 200 y 600 euros, dependiendo del tamaño y complejidad. Esto incluye la consulta veterinaria, la anestesia, el procedimiento quirúrgico y las revisiones posoperatorias.
Por otro lado, los tratamientos conservadores, como el drenaje del hematoma y el uso de medicamentos antiinflamatorios, suelen ser menos costosos, con precios entre 50 y 150 euros. Sin embargo, estos métodos tienen una mayor probabilidad de recaída, lo que podría generar gastos adicionales.
Es importante tener en cuenta que el tratamiento de un otohematoma también incluye abordar la causa subyacente. Por ejemplo, si el perro presenta una infección de oído o alergias, el precio del tratamiento adicional (antibióticos, gotas otológicas o pruebas alérgicas) podría sumar entre 30 y 100 euros adicionales.
En algunos casos, si el hematoma no se trata a tiempo y evoluciona hacia complicaciones más graves, como infecciones secundarias, los costos podrían incrementarse considerablemente.
Finalmente, algunos dueños de mascotas optan por contratar un seguro de salud para mascotas para reducir considerablemente el impacto financiero de estos procedimientos.
Quizás te surja la duda de los gastos adicionales que puedan surgir asociados a los servicios veterinarios necesarios para diagnosticar y monitorear la salud de tu perro. Veamos los más comunes.
¿Cuánto cuesta una consulta veterinaria de urgencia?
Una visita de urgencia es común cuando el perro muestra molestias graves. Este tipo de consulta tiene un costo promedio de 70 a 100 euros, dependiendo de la clínica y si se realiza o no fuera del horario habitual.
¿Cuánto cuesta una analítica sanguínea?
Una analítica sanguínea puede ser recomendada, previa a la cirugía o tratamiento, si el veterinario sospecha de condiciones subyacentes, como problemas de coagulación o infecciones sistémicas.
El coste aproximado de un análisis de sangre en perros es de 70 euros.
¿Cuánto cuesta una radiografía?
Aunque las radiografías no suelen ser necesarias para diagnosticar un otohematoma, pueden recomendarse si el veterinario sospecha de otros problemas estructurales o traumatismos.
El costo de una radiografía varía entre 36 y 43 euros por placa, dependiendo de la clínica.
¿Cuánto cuesta una ecografía?
Las ecografías se utilizan principalmente para evaluar tejidos blandos y pueden ayudar a confirmar la extensión de un hematoma complicado.
El precio promedio de una ecografía es de 40 a 90 euros, dependiendo de la región y la experiencia del veterinario.
Preguntas frecuentes sobre el otohematoma en perros
Terminamos este artículo resolviendo algunas de las preguntas más habituales en consulta veterinaria sobre el otohematoma en perros.
¿Cuánto tiempo tarda en curarse un otohematoma?
El tiempo de recuperación depende del tratamiento. Con cirugía, el hematoma suele sanar en 2 a 3 semanas, aunque puede requerir hasta un mes en casos más graves. Los tratamientos conservadores, como el drenaje, pueden tomar más tiempo y presentar mayor riesgo de recaída.
¿Existen tratamientos naturales para el otohematoma?
Algunos dueños intentan remedios caseros, como la utilización de compresas frías o hierbas antiinflamatorias. Sin embargo, estos métodos no resuelven el problema subyacente y pueden retrasar un tratamiento adecuado, lo que podría agravar la condición. Es crucial consultar siempre con un veterinario.
¿Puede un otohematoma reaparecer después del tratamiento?
Sí, especialmente si no se aborda la causa principal, como infecciones o alergias. La cirugía reduce significativamente la posibilidad de recurrencia, mientras que los métodos conservadores tienen un mayor riesgo de que el hematoma reaparezca.
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