Enseña a tu perro a obedecer señales: stop, sit...

Adiestrar a tu perro no tiene por qué ser complicado. Hay herramientas profesionales que te ayudarán a erradicar los comportamientos inapropiados. Con ellas, enseñarás a tu cachorro a no morder y a convertirse en un perro adulto sano, obediente y feliz. ¿La clave? Comprender los distintos tipos de adiestramiento y el refuerzo positivo.

Un perro educado espera su paseo
Educación básica para tu perro - 123RF

 

Cuando se habla de adiestramiento canino, hay tres tipos de comportamientos que debes aprender a reconocer:

  • Negativo
  • Indiferente
  • Positivo

Adiestramiento canino negativo

El adiestramiento negativo suele venir acompañado de comportamientos inapropiados, es decir, cuando la mascota hace cosas que no sin agradables. Un ejemplo muy claro es cuando muerde la pata de una mesa. En casos así, muchos dueños usan un tono de voz alto y el lenguaje corporal para expresar que esa conducta es inaceptable.

¿Sirve actuar así? No. Reaccionar de esta manera ante un comportamiento inadecuado solo hará que la familia se relacione de mala manera con el perro, creando una asociación negativa o infundiéndole miedo.

Adiestramiento canino indiferente

El adiestramiento indiferente, aunque no lo parezca, es el más habitual. A fin de cuentas, es difícil estar las 24 horas del día interactuando con una mascota. Cuando esté solo, tu perrito hará lo que quiera y no tendrá ningún tipo de asociación a su conducta.

Adiestramiento canino positivo

El adiestramiento en obediencia por excelencia. Emplea los mimos, comidas y juegos para construir una buena relación con la mascota. Este será el ideal para enseñarle obediencia básica y un par de trucos interesantes.

El refuerzo positivo pesa más que el negativo

Establecer una relación positiva con la mascota ayudará a crear un vínculo especial entre el dueño y el animal. Sin ese vínculo positivo, el adiestramiento canino se complica. El refuerzo positivo es mucho más fuerte que el indiferente o el negativo. Además, favorece la salud mental de ambos.

Si te enfadas cuando tu perrito no acude a ti y, al verlo, le riñes o castigas, es posible que tenga miedo de aparecer voluntariamente la próxima vez. Si, en cambio, le premias cuando viene, asociará su nombre y tus llamadas con algo positivo. Esto hará que se acerque a ti alegre y moviendo la cola.

¿Cómo crear un vínculo positivo con tu perro?

Hay dos cosas que les encanta a los perros: comer y cazar. Ambas le vienen de fábrica. Aunque cada animal tiene su carácter y personalidad, casi todos los canes reaccionan bien ante la comida y la caza. ¡Es algo instintivo!

La comida como refuerzo positivo

El tema de comer, está claro. Pero hay un matiz importante en este punto: no se trata solo de comer. Para crear un buen vínculo, además de la comida, hay que trabajar con premios.

Los premios deben ser algo especial, es decir, por encima de la media de lo que suele comer. Si le das premios a tu cachorro ante un buen comportamiento, empezará a verte con otros ojos.

 

Los premios gratificantes te ayudarán a enseñarle a tu perro un par de trucos interesantes.

"Cazar" como refuerzo positivo

Quizás no puedas salir a cazar con tu mascota, pero lo que sí puedes hacer es jugar con ella. Perseguir algo en movimiento, jugar con una pelota o tener un mordedor en casa lo ayudará a soltar el estrés, divertirse y verte como uno más de la manada.

Cada perro tiene preferencia por un tipo de juguete: es cuestión de prestar atención para ver cuál prefiere el tuyo.

Jugar fortalecerá el vínculo entre ambos y fomentará el equilibrio emocional del animal. Mover la cola cuando llegas a casa, buscarte para jugar y darte lametazos es la forma en que tu perro trata de demostrarte que ese vínculo existe y es positivo.

 

Claves de educadores caninos para enseñar trucos a los perros

Hay varios consejos de adiestramiento canino que pueden servir para enseñar trucos a tu perro, como sentarse, saltar, correr, etc.

¿Cómo enseñarle el nombre a un perro?

Cuando tengas el nombre ideal para tu perro, ¡enséñaselo! Desde el primer día que llegue a casa, ya sea un perro adulto o un cachorro, necesita comenzar a asociar su nombre con algo bueno. Para ello, puedes usar trocitos de salchichas o golosinas.

Coge el premio con la mano. Acércate a tu perro con la palma de la mano extendida. Di su nombre en voz alta cuando se coma la golosina. También puedes usar un juguete como reemplazo. Con ese ejercicio tan simple, estarás:

  • Creando un vínculo positivo entre los dos, algo importante para la vida en familia.
  • Haciendo que el perro asocie su nombre con algo positivo. Así, cada vez que lo escuche, se pondrá contento.
  • Enseñándole a responder cuando lo llames. Cada vez que oiga su nombre, pondrá atención o irá hacia donde te encuentres.

Al principio, debes premiarlo siempre: esto hará que el perro se acerque. A medida que el comportamiento se vaya fijando en su cabeza, espacia las golosinas hasta que desaparezcan. Cuando tu perrito venga a ti sin necesidad de un premio, ¡habrá aprendido su nombre!

¿Cómo enseñar a un cachorro a no morder?

Si tienes un cachorro inquieto en casa, puedes adiestrarlo para que no muerda las zapatillas o el mobiliario. Cuando esté en pleno acto, di su nombre en alto para que acuda a ti. Prémialo cada vez que deje de morder algo y se quede a tu lado.

¿Cómo enseñar a tu perro a seguir señales?

Puedes usar ciertas palabras para adiestrar al perro, enseñarle trucos y hacer que gire la cabeza cuando lo llames o que camine a tu lado. ¿Las más comunes?

¡Sentado!

También conocido como "sit", traducido en lenguaje canino como "si me siento, ocurre algo bueno". Para iniciar este ejercicio, utiliza la comida. La golosina se pondrá en la palma de la mano extendida, tapada por el dedo gordo. Cuando muevas la mano y tu amigo peludo la siga, ¡se producirá la magia!

La mano será como una varita que le dirá al perro hacia dónde ir. Cuando esté con el hocico pegado a tu mano, mueve la mano hacia arriba y atrás para que el perro levante la cabeza y se siente. Justo en ese momento, prémialo con la golosina y repite la orden en alto: "sentado" o "sit", lo que prefieras.

Poco a poco, tu perrito asociará la orden con lo que está haciendo. En poco tiempo, no tendrás que mover la mano o regalarle una golosina. Bastará con dar la orden verbalmente para que el perro se siente. ¡Ahí te sentirás como un verdadero educador canino!

¡Quieto!

Si ya tu cachorro o perro adulto te obedece cuando escucha "sit" o "sentado", es momento de enseñarle una nueva orden. Cuando esté sentado, da un paso hacia atrás y di "quieto" en voz alta. Si no se mueve, prémialo con una golosina lo más rápido que puedas. A medida que lo vaya pillando, alarga el tiempo entre recompensas.

Es normal que las primeras veces tu perro se acerque a ti. Si lo hace, es importante no premiarlo y volver a comenzar el ejercicio.

Recuerda: ¡los perros no aprenden idiomas!

Es habitual escuchar ordenes caninas en inglés e incluso en alemán, pero el lenguaje de los perros funciona de forma distinta al humano. Para los perros, existe un gesto o un sonido asociado a un comportamiento. Esa señal suele venir con algo positivo (comida o juego) o negativo (castigo).

Puedes usar órdenes en cualquier idioma, incluso una palabra inventada. Realmente, ellos no notarán la diferencia. Lo único que se recomienda es que las órdenes sean claras, cortas y distintas entre sí. Esto ayudará a tu perro a memorizarlas.

Con estos trucos de expertos, ya podrás salir a dar paseos por el bosque con el perro sin temor a que se pierda o salga corriendo. Cada vez que lo llames, ¡irá a tu lado!

Sobre el autor

Vanessa Galán