Todo sobre las radiografías para perros: precios, qué se ve y para qué sirven

La radiografía en perros se considera uno de los servicios veterinarios más importantes, porque permite diagnosticar y tratar una amplia variedad de problemas de salud sin necesidad de procedimientos invasivos. Desde evaluar fracturas y displasias hasta detectar problemas gastrointestinales, cuerpos extraños o tumores, las radiografías proporcionan una visión interna crucial.

¿Cómo se le hace una radiografía a un perro y para qué sirve?

Radiografía para perros

La radiografía veterinaria es una técnica de imagen. Al igual que en los humanos, se emplean rayos X que atraviesan el cuerpo del animal y producen una imagen en la que se diferencian los tejidos blandos de los huesos.

Es vital para el diagnóstico preciso de fracturas, displasias de cadera, tumores y otros problemas internos que podrían no ser evidentes en un examen físico.

Existen diferentes tipos de radiografías:

Radiografía simple y doble

La radiografía simple es la más común y se realiza tomando una única imagen de una parte del cuerpo desde un ángulo específico.

La radiografía doble utiliza dos imágenes desde ángulos diferentes, lo que proporciona una visión más completa que permite al veterinario realizar un diagnóstico más preciso.

Radiografías con y sin medio de contraste

Las radiografías con medio de contraste se utilizan cuando es necesario observar con más detalle los órganos internos o el sistema vascular. Se le administra al perro un medio de contraste para resaltar ciertas estructuras.

Las radiografías sin medio de contraste, por su lado, son suficientes para la mayoría de diagnósticos en clínica veterinaria, como evaluar fracturas, artritis o la salud general de los órganos torácicos y abdominales.

¿Cuánto se tarda en hacer una radiografía a un perro?

Hacer radiografías simples a un perro es un proceso relativamente rápido. En general, suele tomar unos pocos minutos, ya que la captura de la imagen ocurre en un segundo.

Sin embargo, si el perro necesita estar sedado para mantenerse inmóvil, el tiempo total puede extenderse a 20-30 minutos para incluir la administración y recuperación de la sedación​. En el caso de realizar radiografías con contraste, la duración puede ir desde unos 30-40 minutos hasta varias horas.

¿Cuánto cuesta hacer una radiografía dentro de las tarifas veterinarias para perros?

Fractura en una radiografía

Si observamos en detalle las tarifas veterinarias para perros, encontramos que el precio de una radiografía puede variar según el tipo de procedimiento, la región en la que se realice y los demás servicios veterinarios que se ofrezcan en la clínica veterinaria.

Por este motivo, lo recomendable es contar con un seguro veterinario para mejorar la salud y bienestar de tu perro, a la vez que evitas gastos inesperados.

Veamos los precios estimados para las radiografías más comunes:

Radiografía abdominal

La radiografía abdominal es una de las pruebas más frecuentes cuando se sospecha de problemas gastrointestinales o cuerpos extraños.

Su precio puede rondar los 43 euros, si se trata de una radiografía simple y grande. Si se utiliza un medio de contraste para obtener una imagen más detallada de los órganos el precio aumentará.

Radiografía de tórax

La radiografía de tórax se utiliza principalmente para evaluar la salud del corazón y los pulmones del perro.

Su precio también suele ser de unos 43 euros, aunque también puede variar según la complejidad del caso y si se requieren múltiples imágenes desde diferentes ángulos​.

Radiografía de diagnóstico preciso de displasia de cadera

La radiografía de displasia de cadera es crucial para razas de perros predispuestas a esta condición, como el pastor alemán.

Dado que la precisión es clave y a menudo se requiere sedación para mantener al perro inmóvil, el precio suele oscilar entre los 43 y 86 euros.

Diferencias entre el precio de una radiografía, una ecografía y una analítica o análisis de sangre en perros

Los precios de las principales pruebas diagnósticas veterinarias pueden variar considerablemente entre las clínicas veterinarias.

Pero, a grandes rasgos, una radiografía suele costar entre 36 y 43 euros, dependiendo del tamaño. 

Por su parte, las ecografías para perros, más útiles para visualizar tejidos blandos, problemas gastrointestinales y otros órganos internos, rondan los 42 y 90 euros. Son ligeramente más costosas debido a la tecnología y especialización requeridas.

Por último, los análisis de sangre en perros son generalmente más accesibles, con precios que van de 30 a 70 euros, dependiendo de la complejidad del análisis y si se requieren más servicios veterinarios.